Partimos de la construcción de una base de datos de víctimas de violencia feminicida, que comprende desde el 24 de marzo hasta el 31 de agosto, meses en los que la cuarentena por COVID-19 fue más estricta en el país, de acuerdo con los decretos de emergencia que obligaron a toda la población a estar aislada obligatoriamente.
Nos apoyamos en el Observatorio de Feminicidios y en la labor de medios de comunicación como Cerosetenta, RCN Radio, entre otros, que cubrieron los feminicidios. Hicimos la lectura y archivo juicioso de todas las posibles noticias registradas.
De esta manera, logramos identificar en una etapa previa a 237 mujeres de todas las edades: adultas mayores, jóvenes y niñas, que ya no están, pero que redimimos en cada uno de los nombres que ves aquí. Nuestro anhelo es que esos datos nos lleven a encontrar a sus familiares y así poder narrar sus historias.
Quedó por fuera el registro de 13 casos de mujeres víctimas de violencia feminicida a las que no pudimos llegar a sus datos personales como nombres, edades y circunstancias precisas de los hechos.
Hay otros casos en el que el homicidio fue producto de un robo, una bala perdida en medio de enfrentamientos, cuentas de cobro en las que ellas terminaron siendo víctimas por razones casi del azar. Esto generó debate al interior del equipo periodístico. Nos preguntarnos si era conveniente etiquetarlos como feminicidios, pero los incluimos por dos razones poderosas: por provenir del Observatorio de Feminicidios, metodología a la cual suscribimos y porque, en últimas, a esas mujeres también las rodea el silencio, el anonimato, la injusticia y la violencia feminicida.
La justicia es y será un tema de Fiscalía, jueces y tribunales. Por tanto, el foco estará puesto en ellas y quiénes fueron.
Técnica y tratamiento de los perfiles in memoriam: cada historia fue construida a partir de una búsqueda de familiares y amigos de las víctimas de feminicidios. Esta labor fue realizada a través de reportería y una campaña en las redes sociales de Cuestión Pública, que tuvo como fecha de arranque el 18 de noviembre del 2020. A través de post expusimos algunos casos de feminicidio y les contamos de nuestra intención de homenaje a las víctimas. Así mismo, les pedimos que nos contactaran a través del correo electrónico yanoestoyaqui.cuestionpublica@gmail.com, que diera paso a la construcción del perfil in memoriam.
Una vez aceptaban construir las historias, éstas se obtenían a través de entrevistas telefónicas. No indagamos sobre las circunstancias del suceso violento sino sobre el recuerdo más feliz que tuvieran con su pariente / amiga y cómo quisieran que fuera recordada. Para cada caso se hizo, de la mano con los familiares y amigos de la víctima, una labor de verificación de datos como su nombre y edad.
Cada testimonio brindado recibió un tratamiento de edición de estilo y se agregan algunos datos de contexto como fechas y lugares.