Roy sin Barreras, el nuevo presidente del Senado

(20/07/2022)

En política, Roy Barreras es un camaleón. El senador ha militado en cuatro partidos distintos y en menos de doce años pasó del uribismo al santismo y ahora a ostentar por segunda vez la presidencia del Senado, esta vez desde el petrismo. Ha participado del negocio de la medicina alternativa en Cali, fue uno de los protagonistas de los recientes Petrovideos y salió salpicado en el caso de la DNE, así como también ha sido un ávido defensor del proceso de paz.

Roy Barreras Montealegre vuelve a la cima de su carrera política. Con 58 años, repite como presidente del Senado, el cargo más codiciado por cualquier legislador en el Congreso, en el entrante Gobierno de Gustavo Petro. La primera vez que lo hizo, en 2012, representaba los intereses del Partido de la U.

Su trayectoria ha sido amplia: fue panadero, taxista, se graduó en 1987 como médico cirujano de la Universidad Nacional. Cuenta con estudios de posgrado en Sociología y Administración en la Universidad del Valle (1992-1993). Ha sido congresista desde 2006, es decir por 16 años. Algunos de sus allegados dicen que le apunta a la Presidencia de la República, opción que Roy Barreras no ha descartado, teniendo en cuenta su precandidatura de marzo de 2021 que terminó por convertirse en una campaña victoriosa al Senado junto al Pacto Histórico.

Ha estado casado tres veces. El año pasado se separó de la exfiscal caleña y hoy representante a la Cámara por el Pacto Histórico, Gloria Arizabaleta, quien ha frecuentado el mismo círculo de amigos íntimos de la cuestionada vicefiscal general Martha Mancera, conformado por funcionarios investigados por presunto favorecimiento a narcos. Roy tiene cinco hijos, entre estos Francisco, Paula, y Roy Alejandro.

Iván Aguirre y Ana Victoria Nieto son amigos de la vicefiscal Martha Mancera y de Gloria Arizabaleta, expareja de Roy Barreras y nueva congresista del petrismo. Aguirre y Nieto enfrentan un juicio por presuntamente pertenecer a una organización judicial que recibía dinero a cambio de evitar capturas y ‘engavetar’ procesos contra narcotraficantes en Cali, como Jair Sánchez Hernández, alias ‘Mueble Fino’. También por amenazar testigos y fabricar procesos falsos contra otros funcionarios..

Este último fue el secretario de Planeación de la gobernadora del Valle del Cauca, Dilian Francisca Toro, quien ha sido cercana a Roy Barreras y con quien ha compartido un sector en común: el de la salud. Además, Roy Alejandro fue concejal de Cali de 2012 a 2015, como su papá, cuya carrera política inició de la misma manera hace más de dos décadas.

Lejos de los avatares de la política, su otro hijo Francisco Barreras Cortés es matemático, área en la que cursa un doctorado, ajedrecista y ha sido contratista del DANE para servicios de análisis de Big Data. Por su parte, Paula Barreras se graduó en 2014 como médica cirujana —como su padre— de la Universidad de los Andes y en la pandemia por Covid-19 se desempeñó como médica residente de neurología en el reconocido hospital Johns Hopkins en Estados Unidos.

Barreras: Leal al poder, no al partido 

Roy Barreras entendió desde temprano las cualidades más importantes que debía tener un político: paciencia para esperar la oportunidad y flexibilidad para mantenerse en el poder, sin importar desde qué orilla política. Así ha conducido su carrera pública. Comenzó aspirando al Concejo de Cali, ahí fue candidato en seis oportunidades con el Nuevo Liberalismo y luego con Cambio Radical. En 2006 fue elegido representante a la Cámara por Cambio Radical, en su séptimo intento de tener una curul en el Congreso.

De Cambio Radical lo expulsaron en abril de 2009. Los motivos varían según la prensa: Por su gran protagonismo en los medios y asumir una vocería en el partido que no le correspondía. También por su apoyo a la reelección de Álvaro Uribe a la Presidencia mientras Germán Vargas Lleras figuraba como candidato para las elecciones del año siguiente que se traducía en una “deslealtad” al partido, como lo calificó Aurelio Hoyos, presidente de la Comisión de Ética del partido en ese año.

Viviana Correa, con quien trabaja hace 16 años y es su jefe de prensa, lo defiende de quienes lo señalan como oportunista tras haber sido del Nuevo Liberalismo, de Cambio Radical, de la U y ahora del Pacto Histórico. En conversación con Cuestión Pública, Correa explicó que nunca “cambiaron de partido por conveniencia”, como señalan sus detractores. “Fue muy fuerte cuando nos expulsaban de cada partido porque es un hombre de convicciones (…) fue por el tema de la paz, por su convicción de sacar adelante la paz”. 

Pero estos cuestionamientos, no serían los únicos que tendría entre 2008 y 2009.

Entre la DNE y Caprecom

Pese a la expulsión de Cambio Radical en 2009, ese año fue provechoso para los negocios del círculo cercano del senador. Cuestión Pública revela que la exesposa de Roy Barreras, la médica Sandra Elizabeth Cortés Rocha, compró dos apartamentos a la Dirección Nacional de Estupefacientes entre 2008 y 2009. Ambos están ubicados en Cali. El primero, con un área de 111 metros cuadrados, lo recibió tras pagar $71 millones el 14 de marzo de 2008. Lo vendió un año después por $115 millones a Tulia Velásquez López. Sandra Cortés adquirió un segundo apartamento a la DNE por $165 millones en mayo de 2009. Es decir, ambos durante el Gobierno Uribe y en la misma época en la que políticos lograron bienes para sus contactos y familiares gracias a una red de corrupción en la entidad. En 2018, un hermano de Sandra Cortés, es decir, un excuñado de Roy, hacía parte de su UTL como asistente III: Juan Carlos Cortés Rocha.

“Un político que iba mucho a la DNE era Roy Barreras”, dijo el condenado exdirector de la DNE, Camilo Bula en 2018 en una entrevista con W Radio. Barreras lo negó. En 2017, la Corte Suprema de Justicia archivó una investigación contra el senador por el caso DNE, en la que se investigaba si él o sus allegados se habían beneficiado de bienes incautados al narcotráfico. En particular, la Corte decidió que no había pruebas de que Barreras hubiera influido para que Jorge Villavicencio, el pastor de una iglesia que lo apoyó políticamente, recibiera de la DNE en 2009 un lote en Cali expropiado a la mafia. En el expediente del caso según El Espectador, Villavicencio dijo: “ubiqué al representante Roy Barreras y a otros cuatro senadores, que prefiero omitir sus nombres, y ellos me ayudaron a que la DNE tuviera en cuenta nuestra petición”.

En 2009, según contó Daniel Coronell en su columna El Iscariote, Roy habría tenido una ficha en el Ministerio de Comercio con el visto bueno de la Presidencia de Álvaro Uribe: Giovanny Javier Chamorro Ruales se desempeñaba como jefe de Control Interno de la cartera, tras haber sido jefe de campaña y miembro de UTL de Barreras. Eran buenos años: el gobierno de Uribe también tenía entonces a Gloria Arizabaleta, que luego sería su esposa, como directora de la regional del Valle de la Aeronáutica Civil y a un amigo de Roy como director del Valle y el Cauca de la Escuela Superior de Administración Pública (ESAP), Luis Alejandro Acosta Narváez.

En El poder lleva bata blanca, Cuestión Pública contó que Caprecom, una EPS subsidiada, fue investigada por la adjudicación de contratos y desvío de recursos. Según El Tiempo, entre noviembre de 2010 y enero de 2011, Gloria Arizabaleta se desempeñó como asesora del subdirector de esta entidad entre 2009 y 2010, e incluso su nombre estuvo en el sonajero para ser subdirectora de toda la EPS, pero no cumplía con los requisitos. Barreras y Arizabaleta se casaron en 2012, en una boda con más de 250 invitados incluyendo al expresidente Juan Manuel Santos.

La primera presidencia del Senado

Para 2010 Barreras ya hacía parte del Partido de la U, del entonces expresidente Álvaro Uribe, donde permaneció casi 10 años, es decir, dos periodos como senador. Desde esa colectividad, logró el cargo de presidente del Senado de 2012 a 2013. En 2013, cuando Roy Barreras dirigía esta corporación, salió a la luz un presunto pacto que había hecho en campaña con una de las iglesias evangélicas del Valle del Cauca, que supuestamente consistía en oponerse a cualquier proyecto en contra del concepto tradicional de familia, según informó la Revista Semana en febrero de 2015. Recordemos que Roy Barreras fue clave en la elección de Alejandro Ordóñez como procurador general.

Foto: Julián Gabriel Parra De Moya.

En esta época, también lo siguió acompañando el escándalo de Caprecom. Julián Andrés Restrepo, que fue secretario privado del senador según publicó El Tiempo en 2014, figuraba como representante legal de Cleaner S.A., una empresa caleña a la que, en el año 2013, como revelamos, se le adjudicó el contrato de aseo en los 130 centros penitenciarios en los que la EPS estatal Caprecom prestaba servicios de salud. Ese mismo año obtuvo otros dos contratos con el E.S.E. Hospital Isaías Duarte de Cali por más de $186 millones en contratación directa, según la base de datos de contratación pública.

El camino a la Paz y la vida artística


En el 2012, siendo parte del partido de la U comenzó impulsando en el Congreso el marco legal para la paz, convirtiéndolo en uno de los mayores promotores del Acuerdo de Paz de Juan Manuel Santos y las FARC. El repudio por la guerra y la búsqueda de la paz nació muchos años antes, en su círculo familiar. Roy es hijo de Nelly Montealegre, una mujer de Caloto, Cauca que se desplazó a Bogotá después de que su padre (abuelo de Roy), un campesino liberal, fuera asesinado por la violencia bipartidista.

Desde 2014 se desempeñó como negociador plenipotenciario del proceso de paz. También en 2017 fue destinado como integrante de la comisión negociadora de paz en los diálogos con el Ejército Nacional de Liberación (ELN), aunque este acuerdo nunca concluyó debido a que el presidente Duque se levantó de la mesa de negociación. 

«Roy Barreras no fue el político más importante en la campaña de Gustavo Petro. Pero sí es el único político del establecimiento que realmente está jugado a favor de la paz y ese es su gran valor», nos dijo en off the record uno de los hombres del círculo más cercano a Gustavo Petro.

Su equipo de trabajo coincide en que Roy Barreras es un hombre apasionado por su labor y su persistencia en la búsqueda de la solución pacífica al conflicto armado. Lo describen como un hombre perfeccionista, hábil, inteligente y sagaz. De sus defectos destacan también el mal genio, la impaciencia y la impuntualidad, pero lo justifican con su pasión por la política: “se le mete algo en la cabeza y es obsesionado y obstinado”. 

Su labor en el Proceso de Paz desató una etapa artística en Roy Barreras de la que derivaron dos poemarios: Polvo eres y en polvo te convertirás, en homenaje a las víctimas del conflicto y La fogata sin tiempo —junto al poeta Fernando Denis—, donde explora la angustia y la incertidumbre de llevar a cabo un proceso de paz, la impotencia de “ver a las víctimas caminando hacia la muerte” y la inutilidad de la guerra. 

En 2013 ya había publicado el primer poemario Que la paz sea contigo, también en honor a las víctimas y escrito en una noche. En un tinte más político, también publicó dos libros de ensayos: En qué creemos y La Paz: dos versiones enfrentadas. 

De derecha a izquierda 


Roy Barreras llega a la presidencia del Senado como uno de los hombres de confianza del primer Gobierno de izquierda de Colombia después de hacer parte de las bancadas favorables a los gobiernos de los últimos 16 años, incluyendo los dos mandatos uribistas desde los que se estigmatizó a la oposición izquierdista. Es innegable que Roy tiene un amplio historial como miembro de los partidos de la derecha colombiana.

El uribismo no fue solo su corriente política mientras estuvo en Cambio Radical y el Partido de la U, también fue su casa. Defendió una tercera reelección de Álvaro Uribe y reconocía al expresidente como un político de la “talla histórica de [Simón] Bolívar”, como dijo en entrevista a Revista Semana en 2012. Tanta fue su cercanía con Uribe, que este fue padrino de bautizo de uno de los hijos de Roy.

Pacho Santos, vicepresidente durante el Gobierno de Uribe, le dijo a Cuestión Pública que le tocó vivir la etapa poeta de Roy Barreras y la “zalamería, donde hablaba bellezas de Uribe”.

También reconoció sus cualidades: “Conoce el Congreso como pocas personas, para eso se requiere ser muy inteligente e ingenioso”, y sugirió que las aspiraciones en la política de Barreras van más allá de la Presidencia del Senado. “Su manera de hacer las cosas le van a pasar factura (…) solo piensa en él, en nadie más”, agregó el exvicepresidente.

Santos, como muchos miembros de la esfera política, describió a Barreras como un “camaleón”, identidad que se le ha otorgado por su cambio de partidos y sectores políticos. Esa capacidad de adaptación, como la describió Pacho Santos, se vio cuando pasó sin asco de tener una estrecha relación con Álvaro Uribe a ser uno de los negociadores del Acuerdo de Paz de Juan Manuel Santos.

De acuerdo con Viviana Correa, jefe de prensa de Roy, el divorcio con el uribismo se dio por la seguridad democrática “más de derecha y guerrerista”. Según Correa, Barreras se dio cuenta de que ese tipo de política no le beneficiaba al país.  

Fabio Valencia Cossio, a quien entrevistamos por haber sido ministro del Interior cuando Roy hacía parte de la bancada uribista, no coincidió con esas razones.

Habiendo hecho parte de la transición de Roy del uribismo al santismo, Valencia lo recordó como un político entusiasta y un visitante continuo de la Casa de Nariño: “[Roy Barreras] es gobiernista por naturaleza, es inteligente y preparado, pero su entusiasmo y sus cualidades las pone al servicio del Gobierno de turno. No hay coherencia en sus convicciones”.

Su aterrizaje en el petrismo


Desde hace un año y medio, Barreras empezó a asistir a las reuniones privadas de Gustavo Petro donde no solo se planeó la campaña presidencial que lo llevó a la victoria, sino que lo llevó a dirigir las ruedas de prensa del Pacto Histórico, el reciente retiro programático y legislativo y ahora la presidencia del Senado. Roles que no han logrado otros senadores que llevan años acompañando al presidente electo.  

Sobre la mesa se ha puesto la discusión de quién tenía mayores méritos para el cargo de presidente de la cámara alta. Consultamos a Iván Cepeda, senador del Pacto Histórico, sobre estos roces dentro del partido: “Entiendo que otros colegas tengan aspiraciones justas, como el senador Alexander López, Gustavo Bolívar o la senadora María José Pizarro. Todos ellos tienen méritos”.

Lejos de cuestionar este nombramiento, Iván Cepeda calificó la decisión como correcta: “Necesitábamos en este primer momento del Congreso unas mayorías parlamentarias, y Roy ha demostrado que ha podido generarlas. Ha tenido la destreza para producir la coalición que era necesaria”.

Cepeda también reconoció el cambio de corriente política hacia la izquierda de Roy Barreras, a quien describe como un político liberal, como un acto de audacia. “No le temió como muchos a hacer una alianza con nosotros. Esa decisión motivó a que otros políticos después de él, también valientes, dieran ese paso (…) Él tiene una convicción que la defiende a un alto costo, aliarse con nosotros no era fácil”, aseguró el senador. 

Pese a sus cuestionamientos por las alianzas del Pacto Histórico con políticos señalados de paramilitarismo lideradas por Roy Barreras durante la campaña, el senador Wilson Arias coincidió en que su nombramiento como presidente del Senado fue un acierto del partido. 

“Hay otras personas con méritos importantes, pero comparto con Petro que además de poder hacer una buena argumentación de las reformas que están en curso, también se trataba de convocar otras fuerzas. Reconozco que yo y algunos otros hombres que procedemos de militancias de izquierda, probablemente no tendríamos el mismo recibimiento que Roy Barreras, es un asunto de confianza”, reconoció Arias.

En su línea autocrítica, Wilson Arias también destacó los cambios que quisiera ver en el nuevo presidente de la cámara alta: “Quisiera un Roy menos locuaz (…) pero eso es casi imposible, su naturaleza es pública. Lo preferiría más parco. A veces, tener el opinador encendido permanentemente hace que uno pierda rigor”.  

Del fajo de dinero olvidado a los Petrovideos

Pocos congresistas se pueden preciar de ser ampliamente conocidos en buena parte del territorio nacional: Armando Benedetti y Roy Barreras comparten ese lugar común. A ambos los acompañan críticas similares: navegar de un partido a otro cuando la marea sube o baja para evitar naufragios. También sobre ambos han pesado cuestionamientos alrededor su patrimonio.

En el caso de Roy, por involucrarse en el sector de la salud pese a ser legislador. Como contamos en Sabemos lo que hiciste la legislatura pasada, para el año 2017 el senador Roy Barreras era propietario del 79% de la IPS de Cali Barreras Medicina Alternativa mientras el otro 20% pertenecía a Barreras y CIA S.A.S, una empresa relacionada con actividades inmobiliarias. En su declaración de renta de 2018, Barreras reportó un patrimonio líquido de $4.570 millones. Además, como contó este medio, también tiene una empresa inmobiliaria llamada Portafolio Nelmona SAS. 

También hay episodios que empañan la imagen de un senador que ha sabido proyectar pacientemente su figura ante los medios: un maletín con un fajo de billetes de $10.000 y documentos que dejó olvidados en el Hotel de la Ópera en Bogotá en agosto de 2021. Según el senador, que respondió con desdén al policía que le pidió esperar a su superior para recoger el maletín, el dinero era “para el pago de mi impuesto predial de 2021″. 

Barreras también se vio salpicado en otro episodio en 2016 vinculado con el presunto robo de $1.200 millones de una caja fuerte en uno de sus apartamentos en Cali. Sin embargo, Barreras sostuvo que se trató de “una calumnia” por parte de un policía que pertenecía a una organización criminal. Aunque aceptó haber vivido en el lugar donde fue hurtado el dinero, negó cualquier relación con el hecho. 

A estos escándalos, en plena campaña se le sumaron los “Petrovideos” en las últimas instancias de la segunda y vertiginosa vuelta presidencial del pasado junio. 

En los videos revelados por la Revista Semana, se vio al senador siendo filmado en reuniones a puerta cerrada del Pacto Histórico en las que discutía estrategias para desprestigiar a los contendientes del presidente electo Gustavo Petro, entre de los que figuraban Sergio Fajardo o Alejandro Gaviria. También fue grabado hablando sobre las visitas de algunos de sus compañeros de militancia a algunos presos “extraditables”, para ofrecerles no ser enviados fuera del país.

La resonancia de sus declaraciones fueron tan amplias que el congresista anunció poco después que se alejaba de la campaña de Petro y su fórmula Francia Márquez para no afectarla. Ahora, con un historial de cambio de partidos, defensa de la paz y pasadas acusaciones de presunta corrupción, Roy Barreras está asumiendo la presidencia del Senado en representación del Pacto Histórico. Entre sus principales apuestas está la aprobación de tres reformas claves en el proyecto político petrista: tributaria, a la Policía y la rural.

**Adenda

El 15 de noviembre de 2022 Cuestión Pública corrigió la fotografía donde señaló incorrectamente a Gloria Arizabaleta, actual representante a la Cámara por el Pacto Histórico, como la mujer de vestido de baño rosado junto a la vicefiscal Martha Mancera en medio de un evento social. La fotografía fue remplazada por un collage que incluye la fotografía original y una de Arizabaleta junto al exfiscal Iván Aguirre. Ofrecemos disculpas a nuestros lectores por cualquier desinformación que esto pudo haber generado.