(30/08/2019)
Por: Cuestión Pública
“Esto para nosotros es una nueva Marquetalia”, así le respondió alias Danilo Alvizú, uno de los jóvenes —El líder— que recibió a Gerald Bermúdez, fotógrafo y periodista, en la selva del Putumayo. Recién llegó, otro, menor de edad, a cargo de Danilo, llamó su atención porque el rostro del joven delataba su infancia. Estrenaba un pantalón de campaña, tomaba clases de entrenamiento del fusil y otro, adulto ya, le enseñaba cómo erguirse ante la orden de formación de la unidad. El menor de edad decía con tranquilidad ser guerrillero y hacer parte de las FARC. Entonces Gerald capturó el momento. Un instante de tiempo congelado corresponde a la foto que ves en nuestra portada.
Es una imagen inédita y fue tomada hace cinco meses. El joven pertenece al nuevo frente bautizado como “Carolina Ramírez”, del Putumayo. Allí, aseguran ser casi 3.000 guerrilleros disidentes en todo el país, y que, al parecer, estarían aliados con los jefes de la disidencia del Frente 1, que tiene presencia en Guaviare, Vaupés, Meta y Putumayo. Dicho Frente es reconocido porque fue el primero en desligarse del proceso de paz con las FARC, el 10 de junio de 2016. Los del Frente Carolina Ramírez dicen responder a los comandantes de las disidencias del Frente 1: alias Iván Mordisco (Néstor Gregorio Fernández) y alias Gentil Duarte (Miguel Botache Santillana), que hizo parte de la Delegación de Paz de las FARC y de su Estado Mayor y, se apartó del proceso con varios hombres del Frente 7; Duarte encabeza las disidencias en el Meta. Dicen llamarse FARC, las verdaderas. Y se ve a una generación joven que muta la piel de un fenómeno, de un conflicto armado, que parece emerger.
Una fuente off the record le confirmó a Cuestión Pública que Iván Márquez —quien fuera el jefe negociador de las FARC en los diálogos de paz con el Gobierno y que reapareció en la madrugada de ayer en un video, tras no saberse de su paradero hace más de un año— efectivamente se alió con Gentil Duarte y los disidentes del Frente 1. En el video se vio a alias Jesús Santrich armado y también a alias El Paisa. Márquez, con uniforme guerrillero, leyó el manifiesto en el que irrumpió con la siguiente frase: «anunciamos al mundo que ha comenzado la segunda Marquetalia». Tal y como le había dicho aquel joven al fotógrafo Gerald en plena inmersión, el pasado febrero de 2019. De vuelta al video de Márquez, parecen también anunciar una alianza con la guerrilla del ELN: “buscaremos coordinar esfuerzos con la guerrilla del ELN y con aquellos compañeros y compañeras que no han plegado sus banderas”.
El reportaje aquí presentado es la contracara del video y del manifiesto de Márquez, porque muestra quiénes son realmente los que engrosan el movimiento guerrillero y disidente anunciado. Es lo más reciente que hay sobre esa “segunda Marquetalia”, una alusión a la región donde nacieron las FARC hace medio siglo y fue epicentro del movimiento guerrillero. Los nuevos acontecimientos abren un capítulo que parece un dardo al corazón de los Acuerdos de Paz. ¿Se trata de solo disidencias?, ¿cuál será el nuevo reordenamiento de los Acuerdos de Paz frente a las últimas decisiones de Márquez, El Paisa y Santrich?, ¿cómo hacerlos valer?
Consultamos a expertos y a entidades competentes desde hace dos meses. Era raro centrar nuestras preguntas en las disidencias en tiempos de posconflicto, más aún preguntar por una “posible refundación de las FARC” cuando en el país estamos tratando de pasar la página. Pero si llega un fotógrafo como Gerald y cuenta lo que está sucediendo tras una inmersión de varios días en la selva del Putumayo, te muestra el registro fotográfico que trajo, lo menos que podíamos hacer era ejercer nuestro papel de periodistas de investigación.
Hay una frase del periodista Daniel Coronell que traemos a colación: «La labor del periodismo es buscar la verdad, no hacer justicia. Cuando un reportero tiene que escoger entre lo que es cierto y lo que es justo, debe elegir lo que es cierto». Y esta situación parece ir en contravía de lo que tendríamos que informar: que la mayoría de los desmovilizados tienen otra historia, que los Acuerdos de Paz no se acabaron y que no podemos transmitir pánico.
Aunque esa sea una parte de la verdad, también escogimos publicar El diario de Gerald porque es la cara de la moneda que no estamos viendo. Ante las certezas de ayer, no nos quedó duda de la importancia de este material documental.
Volvamos al registro de ayer. Las interpretaciones del video estallaron en todo el país y el mundo. Tras los anuncios de Márquez, ayer la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) en cabeza de Patricia Linares, presidenta de ese organismo, comunicó el comienzo de un proceso de expulsión de las personas que ahí figuran, entre otros: Iván Luciano Márquez Marín, Hernán Darío Velásquez, Seuxis Pausias Hernández, Henry Castellanos y José Vicente Lesmes; cuyos nombres de guerra corresponden a: Iván Márquez, El Paisa, Jesús Santrich, Romaña y Walter Mendoza. Horas después, la JEP adoptó medidas cautelares y órdenes de captura para todos ellos.
El presidente Iván Duque le salió al paso al JEP con una alocución en Facebook ayer en la que solicitó el retiro de los disidentes de manera inmediata de esta jurisdicción y pidió la orden de captura para los que se rearmaron. «No estamos ante el nacimiento de una nueva guerrilla, sino frente a las amenazas criminales de una banda de narco terroristas que cuenta con el albergue y el apoyo de la dictadura de Nicolás Maduro», dijo el mandatario Duque.
Al respecto, Juan Manuel Santos, exmandatario y Nobel de Paz, dijo ayer en su cuenta de Twitter: «El 90% de Farc sigue en el proceso de paz. Hay que seguirles cumpliendo. A los desertores hay que reprimirlos con toda contundencia! La batalla por la paz no se detiene!».
Queda la incertidumbre, sobre todo, por las medidas que pueda adoptar al respecto el gobierno del presidente Duque. Son decisivas para saber qué rumbo tomarán los Acuerdos de paz.
“Aquí no hubo paz sino el indulto para algunos responsables de delitos atroces a un alto costo institucional”, publicó el expresidente y senador Álvaro Uribe, líder natural del partido de gobierno, el Centro Democrático, en su cuenta de Twitter.
Santrich se alcanzó a posesionar en el Congreso, tema que también deberá ser resuelto en los próximos días. No obstante, la Corte Suprema de Justicia ya le había expedido una orden de captura tras no presentarse a una indagatoria el martes pasado, lo que significaría la pérdida de su curul en la Cámara de Representantes.
Hacia el mediodía de ayer, los líderes del partido FARC, es decir, el movimiento político que surgió producto de los Acuerdos, expresaron: “sentimos vergüenza y pedimos perdón a los colombianos” y anunciaron continuar en defensa férrea del proceso de paz. “Proclamar la lucha armada constituye una equivocación delirante”, dijeron.
Como contexto de un proceso de posconflicto que vienen documentando organizaciones civiles, traemos el más reciente trabajo de la Fundación Ideas para la Paz (FIP), llamado: Trayectorias y dinámicas territoriales de las disidencias de las Farc. En el documento explican que durante las negociaciones de paz “se produce un punto de inflexión en la organización respecto a los objetivos comunes y de carácter histórico que genera desconfianza, incertidumbre, rechazo o inconformismo, y que, a su vez, puede aumentar el riesgo de fragmentación. Así lo muestran algunas experiencias internacionales como Irlanda del Norte, Burundi, RDC y Sudán, donde surgieron grupos disidentes cuya principal motivación fue la oposición a los intentos de paz impulsados por sus comandantes”.
En ese mismo informe, la FIP documentó que en junio de 2016 el país pasó de tener un grupo (Frente 1) a 16 y 18 estructuras con 1.200 integrantes a lo largo de 2017. «con algún tipo de presencia en diferentes zonas de 13 departamentos», reza el documento.
En cuanto al tema de los menores de edad, el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) contestó todas nuestras preguntas. Reproducimos sus respuestas tal cual en una pestaña aparte en la segunda entrega de este material periodístico. No obstante, resaltamos aquí un fragmento del ICBF:
“El ICBF implementa, como estrategia de promoción y prevención para la protección integral, el programa Generaciones con Bienestar, que opera en 916 municipios del país y atiende a 141 mil niños, niñas y adolescentes. También se implementarán proyectos de protección integral con enfoque de fortalecimiento familiar y de apoyo a iniciativas sociales, en el Catatumbo, municipios del sur de Bolívar y los Montes de María, Tumaco (Nariño) y sur de Córdoba.
Por su parte, la Agencia de Renovación del Territorio lidera dos procesos interinstitucionales: organiza la oferta para la atención integral en los Espacios Territoriales de Capacitación y Reincorporación (ETCR) y perfila estratégicamente iniciativas de intervención en los 170 municipios con Planes de Desarrollo con Enfoque Territorial (PDET). Esos procesos de estabilización tienen la pretensión de integrar a la institucionalidad y a las dinámicas sociales y económicas del país, a la población de las FARC que hizo dejación de armas, a sus familias y comunidades de influencia”.
Pero, en interpretación de Cuestión Pública, no es claro si su política podrá detener el reclutamiento ilegal de menores por las ‘nuevas’ FARC.
Más allá de lo nublado que ahora parezca el panorama, queremos dar a conocer el reportaje que hemos estado preparando, junto con Gerald, para que los lectores puedan conocer —casi de primera mano— qué estaba sucediendo meses atrás con Márquez y quiénes son los que están liderando este movimiento.
El reportaje describe todo esto y mucho más.
Cuestión Pública quiere cumplir su papel crítico e independiente. El trabajo presentado no desconoce todo lo logrado en materia de paz. Ni pretende que así se vea. Censuramos los rostros de los menores de edad con el fin de proteger su identidad.
*La autoría del reportaje y del material fotográfico que se presenta a continuación es de Gerald Bermúdez.
El diario de Gerald: La segunda Marquetalia río abajo
Entrega 1 (da clic en la imagen)
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