Así fue la fiesta con Petro y Francia Márquez en el Movistar Arena

(19/06/2022)

El Movistar Arena fue el escenario capitalino en el que los simpatizantes del Pacto Histórico recibieron la noticia que anhelaban desde el domingo 29 de mayo: que hoy, 19 de junio de 2022 podría ser el día en que por primera vez un hombre abiertamente de izquierda conquistaría la Presidencia de Colombia. Aunque hubo angustia con los primeros boletines, cuando Petro tomó la delantera, el escenario se transformó en una fiesta -que incluyó los discursos de la vicepresidenta electa Francia Márquez y del presidente electo- y que se replicó en la Plaza de Bolívar, donde a esta hora continúa la celebración.

En las horas de la tarde el recinto que cuenta con una capacidad de albergar 14 mil personas ya contaba con amplia presencia de asistentes apoyando al candidato del Pacto Histórico y a su fórmula vicepresidencial, Francia Márquez. 

La expectativa e incertidumbre se apoderaba de los asistentes, mientras que las vallas formaban una barrera que parecía infranqueable y la gente, agitando las banderas del M-19 y el Pacto Histórico, arengaba en una sola voz: “queremos entrar”, mientras hombres y mujeres de verde cerraban filas con una respuesta en seco: “¿tienen boleta?”. Frase que alejaba a algunos de la posibilidad de vivir, en primera fila, el que podría ser el momento que partiría en dos la historia del país: Tener el primer presidente de izquierda a pesar de ser una nación con más 200 años de historia.

Las horas pasaban entre música, bailes y arengas, mientras los asistentes esperaban el cierre de las urnas. A las 4:10 p.m. se dio a conocer el primer boletín por parte de la Registraduría que situaba a Rodolfo Hernández en primer lugar. Los siguientes dos boletines se recibieron con miedo y angustia: Rodolfo Hernández seguía en la delantera. 

A las 4:30 p.m., desde la grada norte llegó un nuevo resultado -el del cuarto boletín- y, antes de que las maestras de ceremonia pudieran tomar la palabra, un grito le devolvió el aire a muchos y muchas: Gustavo Petro y Francia Márquez tomaban una estrecha ventaja con el 49.73 % frente al 48.08 % de Rodolfo Hernández y Marelen Castillo.

Pasaban los minutos y se empezaba a marcar una tendencia. Los puños levantados, las banderas ondeantes y las lágrimas en los ojos reflejaban lo inimaginable: estaba cerca la victoria.

Siendo las 4:55, llegó la noticia: Gustavo Petro fue declarado oficialmente como primer presidente de izquierda electo en el país y Francia Márquez, como la primera mujer afro que ocupa la vicepresidencia de Colombia. Los gritos “contundente resultado”, “somos gobierno”, “por fin lo logramos” y un mar de frases más se apoderaron de los asistentes al Movistar Arena, que, sin distinción de edad, género o etnia, se abrazaban aún sin conocerse. 

En otros puntos de la ciudad sonaban pitos, vuvuzelas e instrumentos musicales. La celebración se vivió en distintos rincones e, incluso, se tomó el transporte público. En las estaciones de Transmilenio cercanas al Movistar Arena, los simpatizantes sacaban sus banderas por las ventanas de los articulados. A este coro de celebración se sumaron con sus bocinas los carros que transitaban por la carrera 30 y cuyos pitos se escucharon en el norte, sur, centro, oriente y occidente de la ciudad. 

Al interior del Movistar Arena, la angustia quedó atrás y el ambiente se tornó festivo en su totalidad. La salsa sonó más duro y los gritos con más fuerza “¡Y ya ganó, y ya ganó, Gustavo Petro ya ganó!”. Ahora solo faltaba esperar la llegada del próximo presidente de la República, junto a Francia Márquez Mina.

Foto: Julián Parra De Moya.
Foto: Julián Parra De Moya.

Entre tanto, a la celebración se sumaron algunos rostros visibles: David Racero, representante a la Cámara Bogotá por el Pacto Histórico, junto con el senador Roy Barreras manifestaron su alegría ante el triunfo de su líder: “felicidad absoluta, lo logramos, todo el esfuerzo y reconocimiento de un pueblo que decidió elegir de mejor manera la opción del cambio”, expresó Racero. “Estamos felices hoy con el triunfo de Petro, de Francia, de Colombia, de la paz”, agregó Barreras.

A las seis de la tarde, a una sola voz, se entonaba el Himno Nacional de la República. La frase “Cesó la horrible noche” resonaba a las afueras del recinto. 

Tres jóvenes también se robaron el protagonismo, cuando exigieron con carteles y gritos la libertad de los miembros de la Primera Línea detenidos en diferentes ciudades del país,  el pasado 15 de junio por la Policía y la Fiscalía. 

Sobre las 6:30 p.m., las pantallas del Movistar Arena mostraron la llegada de Petro a los sótanos del lugar, junto a su esquema de seguridad. La euforia creció, ya había llegado el hombre que logró partir en dos la historia nacional. “Sí se pudo”, gritaban los simpatizantes. 

Aquellos que se quedaron por fuera, esperaban que las pantallas proyectaran lo que se vivía al interior. Los asistentes anhelaban escuchar las primeras declaraciones del presidente electo, que se hizo esperar.

Pasadas las 7:00 p.m., Gustavo Petro junto a su familia y Francia Márquez, hicieron presencia en la tarima del Movistar Arena para emitir su discurso ante el triunfo:

«Vamos juntos a erradicar el racismo estructural. Soy la primera afrodescendiente de Colombia en ser su vicepresidenta y quiero presentarles a su presidente Gustavo Petro», manifestó Francia Márquez. También se refirió a la lucha que se hará contra el machismo en Colombia: “Vamos las mujeres a erradicar el patriarcado en nuestro país”.

Seguido de Francia, el presidente electo Gustavo Petro se dirigió a sus simpatizantes diciendo: «Lo que viene es un cambio real, uno de verdad, en ellos comprometemos la existencia, la vida misma, no vamos a traicionar a ese electorado que lo que le ha gritado a la historia es que Colombia cambia».

En su discurso, aprovechó para exigir la libertad de los miembros de las primeras líneas capturados justo en la semana previa a la segunda vuelta: «le solicito al fiscal general de la nación que libere a nuestra juventud», dijo Petro en su arenga. El de Petro fue un discurso de unidad, en el que reconoció el logro de votación de Rodolfo Hernández y en el que tendió puentes con el uribismo y con los empresarios del país. En vez de un llamado comunista, invitó a mejorar o hacer más justo el capitalismo del país, en referencia al modelo neoliberal que ha manejado Colombia. Tanto Márquez como Petro reconocieron que su triunfo es el del campesinado, las mujeres, los indígenas, los afros y la defensa del medio ambiente.

En medio del discurso, Jenny Alejandra Medina, madre del joven asesinado por un agente del ESMAD Dilan Cruz, tomó la palabra para darle la bienvenida como presidente electo en nombre de las víctimas de violencia policial y sus familias. “En nombre de mi hijo Dilan que es una víctima más de este país, en nombre de las víctimas de los falsos positivos, Nicolás Neira, Yuri Neira (…) de todos aquellos que hemos sido víctimas de este gobierno y de los anteriores”, dijo Medina.

Entre los rostros conocidos que acompañaron al líder de izquierda en su discurso, resalta la del político Antanas Mockus. También estaban su esposa Verónica Alcocer, que no contuvo el llanto de alegría durante todo el discurso, y sus hijos.

Foto: campaña de Gustavo Petro.
Foto: campaña de Gustavo Petro.

Posteriormente, se proyectó el anuncio de que el presidente electo estaría en la Plaza de Bolívar celebrando la victoria. Muchos de los que se quedaron por fuera del Movistar no dudaron en desplazarse para sumarse a esta nueva oportunidad de festejar.

Siendo las 8 de la noche los simpatizantes seguían de fiesta a pesar de la lluvia que se ha hecho presente en la ciudad, incluidas las cercanías al Movistar Arena y el centro de la ciudad. Por la carrera séptima continúa el flujo de personas con dirección a la Plaza de Bolívar, donde continuó la fiesta. La plaza está llena y hay batucadas, cánticos, bailes. También se escucha la pólvora, pero siendo las 9 de la noche, Petro no se ha hecho presente, aunque sus simpatizantes lo siguen esperando. La misma Plaza de Bolívar donde Petro hizo sus famosos discursos contra Alejandro Ordóñez y su destitución y donde ahora muchos quieren empezar a “vivir sabroso”, en el primer gobierno de izquierda de la historia colombiana.