“El país de las masacres” siguió durante el primer mes de Petro

(29/09/2022)

Las declaraciones de “Paz total” no alcanzaron para frenar las masacres durante el primer mes del nuevo gobierno. Cuestión Pública consultó las cifras, las regiones y los números de víctimas que tiene el Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz). Una de las respuestas iniciales de Gustavo Petro ha sido la instalación de los Puestos de Mando Unificados por la Vida (PMUV) en 65 municipios y 14 departamentos del país.

En el primer mes del nuevo gobierno, ocurrieron tres masacres en Bogotá, la capital del país. Fueron hechos que prendieron las alarmas en el centro de Colombia, mientras crecían las expectativas sobre la política de “Paz Total” que presentó el presidente Gustavo Petro desde su posesión.

En este caso de Bogotá, el 18 de agosto, la alcaldesa Claudia López informó que se hallaron cuatro cuerpos sin vida, tres hombres y una mujer, en una camioneta en la Autopista Norte a las afueras de la capital.

Una semana después la capital vio una nueva masacre. En la madrugada del 25 de agosto, en el barrio El Amparo de la localidad de Kennedy fueron encontrados los cuerpos de tres personas envueltas en bolsas de plástico dentro de una carreta. Según el secretario de Seguridad, Aníbal Fernández, se trata de una disputa entre grupos del crimen organizado. En este caso en particular se está hablando de la organización criminal de carácter transnacional, el ‘Tren de Aragua’

Posteriormente, el 5 de septiembre, fueron hallados cuatro cuerpos en los barrios La Esperanza, de la localidad de Suba, y Bochica, en Engativá. Esta masacre fue la última registrada durante el primer mes de la presidencia de Gustavo Petro.

Del 7 de agosto al 7 de septiembre, 45 personas fueron asesinadas en 15 masacres en 9 departamentos del país.

Para Juan Pappier, investigador senior de Human Rights Watch (HRW), el gobierno Petro necesita una estrategia de seguridad que permita que los mecanismos de paz funcionen, la cual presione a los grupos armados para negociar de forma genuina y se proteja a la población civil.

Afirma que “durante el gobierno de Iván Duque hubo una política de seguridad que no entendió el desafío en el que estaba el país luego del acuerdo de paz con las FARC”. Esa política “no sirvió para frenar la violencia de los grupos armados ni para proteger a la población civil”.

La apuesta del gobierno son los PMUV

El 3 de septiembre del 2022, el Ministerio del Interior lideró la instalación de Puestos de Mando Unificados por la Vida, PMUV, en 65 municipios y 14 departamentos de Colombia. Estos consisten en la conformación de mesas de diálogo en los territorios que han sido golpeados por el conflicto armado. Allí se coordinan las autoridades para brindar seguridad y protección a líderes y lideresas sociales, firmantes del Acuerdo de Paz y defensores y defensoras de derechos humanos.

Alcaldes, alcaldesas, gobernadores y gobernadoras deben liderar estos puestos de mando con el acompañamiento de los delegados del Ministerio del Interior, Ministerio de Defensa, la Unidad Nacional de Protección (UNP), la Oficina del Alto Comisionado para la Paz (OACP), las Fuerzas Militares, Policía Nacional y particularmente la UNIPEP (Unidad Policial para la Edificación de la Paz).

Estos escenarios oficiales tendrán inicialmente 100 días de trabajo para evaluar la efectividad del trabajo en la reducción de índices de violencia en los territorios donde se instalen.

El primero ya había sido instalado en Caldono (Cauca) el 20 de agosto de 2022. Lo hizo el ministro del interior Alfonso Prada, junto a la ministra del Trabajo Gloria Inés Ramírez, la ministra de Ambiente Susana Muhamad y el presidente del Senado Roy Barreras. Según Indepaz, este es el departamento con más hechos de violencia durante los últimos cuatro años con 340 actos que involucran masacres, el asesinato de firmantes de paz, y de lideres y lideresas sociales.

El último Puesto de Mando Unificado por la Vida (PMUV) instalado hasta la fecha de esta publicación fue en Pereira (Risaralda) el 27 de septiembre del 2022.

Leonardo González, coordinador de proyectos en el Observatorio de DD.HH. y conflictividades de Indepaz, le dijo a Cuestión Pública que estos puestos de mando son un acto simbólico de parte del gobierno nacional para decirle a la sociedad: «Aquí estamos, los tendremos en cuenta y no están solos». Sin embargo, afirmó que mientras no se solucionen los problemas de una manera estructural, estos puestos solo durarán solos unos días y la violencia continuará.

La ‘Paz Total’ es el largo plazo 

Uno de los proyectos de ley al que el gobierno de Gustavo Petro le apunta para alcanzar la ‘Paz total’, fue radicado por el ministro del Interior Alfonso Prada ante la Cámara de Representantes, el pasado 30 de agosto. Busca definir cuál será la política de Paz del Estado en los próximos cuatro años.

Allí proponen:

  • Autorizar que el gobierno nacional dialogue con grupos armados al margen de la ley (Ejemplo: Clan del Golfo, disidencias Farc), con el propósito de establecer un proceso de paz. 
  • La creación del ‘servicio social para la paz’ como alternativa al servicio militar, con una duración de 12 meses y se podrá presentar en cinco modalidades:

  • La creación del ‘Gabinete de paz’ el cual será el mismo gabinete ministerial, pero cada dos meses deberán definir los componentes de políticas públicas de paz.

La oposición del Centro Democrático ha reclamado por las masacres en el gobierno Petro y lo ha hecho para rechazar esta política de paz que implica negociación con grupos criminales. A menos de una semana de la posesión de Gustavo Petro, la senadora Paloma Valencia dijo que las masacres y los asesinatos de líderes sociales eran perpetrados por disidencias de las FARC, el ELN y por los grupos de narcotráfico con los que el gobierno pensaba negociar.

Una posición que contrasta en un partido que tuvo como presidente a Iván Duque, quien en 2020 dijo que lo de Colombia no eran masacres sino “homicidios colectivos”. Él reconoció que sí existieron durante su administración, pero que en realidad no habían vuelto, sino que nunca se habían ido.

Para Leonardo González de Indepaz, el gobierno Petro debe tener doble vía de acción para poder frenar las masacres y asesinatos de líderes sociales. La primera es de negociación rápida, tal como lo está haciendo el alto comisionado para La paz. Tal como lo dice González, en mes y medio de gobierno ha recibido 22 cartas de intención por parte de grupos armados para comenzar diálogos. La otra vía es la presencia del Estado en los territorios donde están en conflicto, en una forma integral más allá de la presencia de la Fuerza Pública.

Hasta hoy, el gobierno del Pacto Histórico le apuesta a estas dos estrategias: los puestos de mando unificados y la implementación de la política de la “Paz total”. Ambas intentarán que Colombia no se convierta en el “país de las masacres” tal como lo dijo el propio presidente Gustavo Petro.